Mapfre se encontraba en 2020 dentro del grupo de empresas del IBEX 35 que cumplen con las recomendaciones de paridad de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Es decir, al menos un 30% de los puestos de su consejo y órganos de gobierno estaban ocupados por mujeres. La aseguradora se situaba justo por encima de ese límite, con un 33% de mujeres en el Consejo de Administración. Según el IX Informe De Mujeres en el Ibex, realizado por la escuela de negocio IESE, exactamente la mitad de las empresas del IBEX 35 cumplían con esta recomendación.
A fecha de enero de 2022, sin embargo, la representación femenina en el Consejo de Administración de la compañía había descendido hasta el 29,4%, por debajo de la recomendación que marca la CNMV. Una cifra que, además, contradice lo fijado por Mapfre en su informe anual de 2020, en el cual se comprometía “a contar con al menos el 40 % de mujeres en el Consejo a partir del año 2022”.
El grupo parece estar atento a la igualdad de género dentro de su organización. Justo en 2020 firmó la adhesión a los Principios de ONU Mujeres en cuestiones de diversidad interna, y desde 2006 ha creado diferentes planes de igualdad. Además, rechaza de forma expresa cualquier tipo de discriminación por razón de sexo.
No obstante, según sus propios cálculos, la empresa sigue presentando una desigualdad salarial entre hombres y mujeres. En el documento Personas y Organización de 2019, Mapfre calculó la brecha ajustada dentro de su organización. Este indicador no solo tiene en cuenta la diferencia de las nóminas medias entre ambos géneros, sino también otros factores personales de los empleados y empleadas. En el caso de Mapfre, ellos incluyen en la fórmula el nivel del puesto, la familia, la antigüedad en la empresa y el cluster en el que trabajan.
Así, según sus datos, la brecha ajustada del grupo es de un 3,06%. Esa cifra cambia en los diferentes países en los que está presente. La rama del grupo en España es la que presenta una mayor diferencia salarial, con un 5,96%. Este porcentaje es inferior a la brecha ajustada en España, la cual se mueve en torno al 12%, según un informe de la CEOE en 2019. Esto quiere decir que los hombres cobran un 12% más que las mujeres por el mismo puesto y con condiciones personales parecidas.
Aun así, Mapfre fue en 2019 la segunda empresa del IBEX 35 con una mayor brecha de género no ajustada, detrás del Banco Santander. En concreto, las trabajadoras cobraban un 28% menos que los hombres. A pesar de las intenciones declaradas opr el grupo en pos de la paridad, la aseguradora ejemplifica el típico techo de cristal que sufren las mujeres en numerosas organizaciones. Mientras que ellas son las predominantes en los rangos de administración de esta compañía, en los puestos superiores de la estructura organizativa su presencia es menor. En los cargos directivos solo hay un 18% de mujeres.
Mapfre ha establecido mecanismos para evitar y corregir comportamientos de acoso sexual en el trabajo y de discriminación. Tal y como relatan en su informe anual de 2020, se denunciaron diez casos de acoso y cuatro de discriminación. Todas las denuncias por acoso se desestimaron tras verificarse la inexistencia del mismo. Lo mismo ocurrió con dos de las denuncias de discriminación. Las que no se cerraron siguen pendientes de resolución interna. Fuentes de Mapfre aseguraron a este medio que los supuestos casos de acoso fueron auditados por agentes externos.
